HERMANAS LUCIANA Y MARÍA FÉLIX DE CUETO

Nacen y fallecen en Montilla entre los años 1691-1766 y 1694-1775 respectivamente. Hijas del escultor cordobés Jorge de Cueto.

Se les conoce con el apodo de “las Cuetas”. Las dos hermanas de idéntica sensibilidad artística, llegaron a ser notables imagineras, oficio normalmente desempeñado por hombres.

Dicen las historias que desde muy corta edad esculpían imágenes y que las amistades de la familia se maravillaban de su facilidad para realizar moldes de escultura mientras conversaban con tranquilidad.

En 1776 hay varios documentos que acreditan que sus obras adquieren fama tanto en el reino de Córdoba como fuera de él.

Muchos son los elogios que se han dedicado a lo largo de los siglos a las escultoras montillanas. Por ejemplo, su contemporáneo el presbítero Antonio Jurado y Aguilar afirma: “Cómo son y cómo fueron las señoras Cueto, que en escultura, perfección, simetría de las imágenes apenas se le encuentra cotejo en las dos Andalucías, llenas ambas de prodigiosas hechuras sus virtuosas manos”.